jueves, 28 de junio de 2012

-Capítulo 2 “Like Dreamers Do”.


 Paul: (…) And I know that from today, I'll see it in the way,That you look at me, And say ah you love me…
Del otro lado del estudio:
Robert: Wellington… Wellington –intentado hacerme racionar- ¡Wellington!
Yo: ¿Ah, sí? ¿Qué pasa, Robert? –reaccioné ya que estaba algo atontada con su música. Consiente de lo que pasaba, pero sin embargo no quitaba la vista de The Beatles-
Robert: ¿Qué dices?
Ese “¿Qué dices? “ Me pareció bastante extraño ya que era la primera vez que alguien de ese lugar me preguntaba sobre mi opinión.
Yo: ¿Que qué digo... ? 
Digo que son la banda más talentosa que verás en décadas. Digo que Paul es la persona más hermosa que he visto. Digo John es precioso, George también y ni hablar de Ringo.
Yo: Uhm… Son muy buenos.
Robert Me miró serio y volvió la mirada a The Beatles. No le dio mucha importancia a lo que dije, claro.
Fin de la canción.
Brian: Y bueno, ¿qué les parece? 
Robert: La verdad es que no nos gusta cómo suenan, y la música de guitarristas está pasando de moda, pero gracias por intentarlo.
Yo: ¿Qué?! Robert, son precisamente lo que TÚ estabas buscando, tan sólo escúchalos, ¡son realmente buenos! ¡Son perfectos! –exclamé muy alterada-
Robert: Wellington, su sonido no es el que buscamos. ¿Luego qué creerá la gente? Si su música es basura, apesta. Ahora quieres por favor calma… -le interrumpí-
Yo: ¿Sabes? ¡Me importa un carajo lo que crea la gente! ¡Tienen más talento que todas las personas de acá juntas! ¡Tienes el gusto como la mierda!  
The Beatles y los demás me quedaron mirando impresionados. Seguramente para ellos aparentaba ser una señorita de buenos modales y esas cosas, pero no era siempre así, ahora de verdad estaba molesta.
Robert: ¿Qué acabas de decir?! –se paró de exaltado la silla en la que se encontraba sentado-
John: ¡Que tienes el gusto como la mismísima mierda y que te jodieras! –repitió como si le hubiera causado mucha gracia- ¡Michelle, eres mi ídola!
George: Robert, tu corbata es horrenda. A quién se le puede ocurrir ponerse una corbata con ositos rositas. –mofándose de él y su horrenda corbata- Y te atreves a hablar de gustos.
Robert: ¡Wellington, estás definitivamente despedida! ¡Vete ya, estúpida!
Me quedé en silencio. Ahora me había calmado. No sabía qué decir; no recordé las consecuencias que traería defenderlos. 
Robert: ¿Qué no oíste? ¿Además de estúpida eres sorda?
Paul: ¡Oye, ya para!  ¿Qué te pasa con mi novia?! –lo empuja-
Yo: ¿Novia? -lo miré muy extrañada, tal como la expresión de Pattie Boyd en AHDN cuando dice: ¿Prisoners?! Sólo que esta vez cambiaba la frase- ¿Yo tuya?
Brian: Contrólate, Paul. Señor, por favor, ella sólo dijo su opinión. Con insultos, pero fue sincera, usted también nos debe una disculpa, ¿no cree?  
Robert: Si tanto la defienden también quieren irse junto con ella, ¿no? Salgan inmediatamente de aquí todos, ¡fuera!
Me retiré con las pocas cosas que tenía, pero antes de llegar a la puerta me devolví para una “despedida”.
Yo: ¡Hey, Robert! –le grité-
Robert: ¿Ahora qué? ¿No te dije que te largaras?
Le enseñé mi rudo dedo de en medio -(?)- Y me fui.
Ya estando afuera.
Brian: Michelle, siento todo lo sucedido. Todo fue culpa nuestra. En verdad me apena mucho. Te doy nuestra sentida disculpa.
Yo: No, fue mi culpa. No te preocupes, de todos modos me iba a ir luego… -aunque sabía que eso no era cierto-
George: Perdónanos.
Paul: De verdad lo siento muchísimo, Michelle. No estés triste, ¿sí? Eres muy hermosa como para estarlo.
Yo: Paul, sobre eso… ¿Puedes venir un segundo?
Paul: Claro. -nos alejamos del resto-
Yo: Bien, ¿por qué demonios dijiste que era tu novia?
Paul: Porque... Michelle, tú…  ¿Quieres... -de la nada aparece George-
George: ¿Interrumpo algo? No, no creo. Eh, Michelle, necesitamos hablar contigo si no es mucha molestia.
Yo: Oh claro, George. –fui con los demás-
Paul: Maldito, estaba a punto de preguntarle si quiera ser mi novia. O sea que dijera que sí. -le dice a George-
George: Já, ¿cómo estás tan seguro?
Paul: Por favor, soy Paul McCartney.
Interrumpe John.
John: ¿El par de novios puede acercarse?
Paul & George: Vete al diablo, John. –se acercaron-
Yo: Entonces... Fue un placer conocerlos, de verdad. Y de volver a encontrarme contigo, Rich.
Ringo: ¿Qué? ¡No! ¿Y a dónde vas?
Yo: Pues, a mi casa.
John: Tú no vas a ninguna parte. -con la cara de pervertido que a veces hace-
Paul: Ay, John por favor.
Yo: Nos vemos pronto, estoy segura de eso.  -los abracé y me despedí de los cinco-
Paul se acercó a mí y me dice:
Paul: Michelle, tú ya sabes lo que siento...
Yo: No, Paul, no lo sé. Nos conocemos recién. Ni siquiera sé dónde vives.
Paul: A sólo unas calles de aquí. Pero eso da igual. –me toma de las dos manos- Michelle, tú me gustas.
“Tú me gustas” Yo le gusto, ¡YO! ¿Pueden creerlo?
Me quedé en silencio unos segundos. Siendo sincera me asustaba algo el hecho de “querer” a alguien que apenas conocí hace unas horas. Jamás creí en el amor a primera vista y todas esas cursilerías, quizá porque nunca lo había sentido, pero había algo distinto en él, era completamente diferente a los otros chicos, pero de todos modos no estaba segura de eso.
Yo: Yo… Sería una tonta si dijera que no siento algo por ti… -bajé la mirada-  ¡Los visitaré, lo prometo! -me alejé corriendo del lugar-
Paul se sentía pésimo; lo habían rechazado, o eso creía. ¿Quién rechaza a Paul McCartney?
Seguía corriendo y ya estaba lo suficientemente lejos de ellos.
Yo: ¿Qué mierda estoy haciendo? –me detuve- Yo... ¡Lo amo! 
Toda la gente me quedó mirando como si estuviera loca.
Yo: ¿Qué? ¿Nunca han visto a chica gritar en la calle? 

lunes, 25 de junio de 2012

-Capítulo 1 “I've Just Seen A Face”.

Londres, Inglaterra. 4 Febrero de 1963.
The Beatles estaba a punto de sacar su primer álbum: “Please Please Me” y ya tenían su primer sencillo, pero aún no contaban con sello discográfico ni estudio.
DECCA Studios.  
Estudiaba composición musical y estaba de práctica en los estudios “DECCA” de Londres, así que mi opinión era ignorada del todo. Era como una especie de sirvienta de todos en el lugar.
Robert, el productor general, mi jefe: -Wellington, hoy vendrán los tales "Beatles", así que no te emociones demasiado, no creo que firmen el contrato. Su música no me convence para nada.
Yo: ¿The Beatles…? - sólo asentí con la cabeza pensando: Claro, idiota, tengo que hacerte caso en todo lo que digas.
No tenía ni la menor idea de quiénes eran los tales “Beatles”. Escuché por ahí su Single Love Me Do, y la verdad es que me parecían geniales, pero jamás les vi el rostro.
Mientras tanto afuera:
Brian: Bajen del auto, chicos, aquí es… -les indicó a los cuatro muchachos-
John: Lo que digas, amorcito. –hablando en tono burlesco-
Brian: Ahhh, ya vamos a empezar. Compórtate, Lennon.
George: ¿Es necesario todo esto?
Paul: ¿Te refieres a lo de la audición?
George: No, a lo de John y Brian. -dijo sarcástico-  Claro que a lo de la audición.
Paul: Jódete. Y sí, así es.
Ringo: Bueno, aquí estamos… -agregó con un tono de nerviosismo-
Asistenta: ¡Oh! ¡Si son los fabulosos Beatles! Pasen, por acá.  -señalando la entrada-
John: Wooh, qué horrible es. ¿Acaso no hay nadie que salve aquí? - les comentó a los demás-
Paul: Silencio, John.  Aunque jajaja, tienes razón, es espantosa.
Ellos entran.
George: Miren, una chica… y es linda –señaló-
John: Bueno, ¿a quién le toca hoy?
George: Paul, voy yo… -volteó- ¿Paul?
Paul había desaparecido y se acercaba a una chica.
Narra Michelle: 
Iba caminando a buscar un vaso de agua, o eso creían. La verdad era una excusa para no toparme otra vez con mi espantoso jefe nuevamente. 
        - ¡Hola! -siento una voz detrás de mí con un amistoso saludo-
Yo: Hola. -dije sin prestar la más mínima atención y siguiendo con mi camino-
       - Me llamo Paul, Paul McCartney.  -decía el chico ya bastante alejado del resto-
Yo: Soy… -las miradas se cruzaron por algunos que parecían cómicos segundos- Soy... M-Michelle Wellington –comencé  a tartamudear tontamente-
"Paul, Paul McCartney": No, la persona más hermosa que había visto en mi vida. Podría decirse que casi me desmayo en ese momento, sin exagerar; y más aún cuando dijo:
Paul: ¡Qué hermoso nombre! Igual que tú, Michelle, Mich… Si te puedo llamar así... 
¿Ah?! ¿Qué?! ¿Cómo?! ¿Me dijo hermosa? ¿Qué mierda digo?! Estúpido, muy estúpido y sensual McCartney.
Yo: Gra-Gracias.  -me puse extremadamente nerviosa, creo que también lo notó- tú igual... ¡Tienesunoshermososojos! – dije así, de un tirón. Luego me vino el pensamiento de: Demonios, ¿por qué dije eso?! Me comporto como una completa imbécil.
Paul: Jajajaja no más que los tuyos, son muy bellos. –sonrió-
Yo: Jaja -solté una risita nerviosa que me hizo parecer idiota; Después de eso quedamos en un silencio incomodo, muy incomodo. 
Mientras con los demás:
John: Ese Paul, no puede estar ni una hora sin una chica. 
George: ¿Perdón? ¿Oí decir eso del mismo John Lennon? 
John: Bueno qué, déjame.
George: Por lo menos Paul no fantasea con una noche de pasión con Brigitte Bardot...
Ringo: Jajajajajaja George 1 - John 0.
John: Cállate, tú. ¡Además eso fue hace mucho!
George: Sí, como no.
Con Paul & Michelle.
Nos habíamos sentado en unas sillas que estaban por ahí y desde que llegó entonces no dejamos de hablar.
Paul: ¿Y cómo es que tan joven trabajas acá?
Yo: No es exactamente un trabajo, estoy en práctica. Ayudo al productor... Y a ti, ¿qué te trae por aquí?
Paul: Ah, bueno, esperando que venga alguien a atendernos.
Yo: ¿Nos? –me extrañé-
Paul: Sí, yo y a mis amigos; somos The Beatles –sonrió-
Recordé que hoy venían unos “Beatles”.  A decir verdad y por muy cursi que suene sólo tenía ojos para él.
Yo: Oh, claro, qué estúpida soy. Cómo pude olvidarlo. ¡Vuelvo en un segundo!  
Mientras me alejaba me encontré con un amigo que no veía hace años: Richard Starkey, era mi ex novio, y mi mejor amigo que no veía hace mucho. Por un tiempo cuando llegué a Inglaterra, el primer lugar al que me mudé fue Liverpool, ahí es donde conocí a Rich.
        - ¿Michelle? –se volteó a verme-
Yo: ¿Richard? -me quedé mirándolo extrañada-
        - ¡Hola, Michie! ¡Tanto tiempo!  -Me abraza con entusiasmo- 
Yo: ¡Hola, Rich! ¿Cómo haz estado?
Ringo: De maravilla, gracias, ¿y tú?
Yo: Súper… Hey, ¿qué paso con Rory and The Hurricanes?
Ringo: Eso fue hace mucho. Ahora estoy en otra banda, se llama The Beatles.
Yo: ¿Tú también? Vaya, ya conozco a dos Beatles. ¿Cuántos son?
Ringo: Somos cuatro: John, Paul, George y yo.
Yo: Oh, ya veo… Paul. -recordando lo vivido hace minutos con Paul-
Ringo: Ven para presentártelos. –me toma la mano-
Yo: ¿Qué? ¡Richard, no!  -exclamé exaltada y muy sonrojada-  
Ringo: ¡Veeeeen!  -me jala del brazo-
Entre forcejeos llegamos a donde se encontraban los cuatro muchachos.
Ringo: Chicos, ella es Michelle. Michelle ellos son… bueno, ellos.
Mucho gusto, novia de Ringo y amante de Paul. –dijo un chico que parecía siempre contar con una hermosa y adorable sonrisa, de cabello castaño algo alborotado, y pequeños ojos marrones.
Paul miraba como si le causara gracia ser mi supuesto “amante”.
Yo: ¿Qué? –Lo miré con mucha extrañeza-
- Que me llamo John. -sonrió- 
Yo: Hola, John –le devolví la sonrisa-
- Un gusto, Michelle, soy George Harrison. –parecía estar algo sonrojado el chico de ojos cafés con una mirada única, muy intimidante, pero a la vez atractivo. Era algo delgado y tenía el cabello oscuro, muy sencillo.  
Yo: Hola, George, el gusto es mío. Veo que también eres de Liverpool, digo, por el acento…
¿Y ahora por qué dije eso? Creo que la cagué un poco, ¿no?
Yo: Lo siento, no sé porqué dije eso. Cuando estoy nerviosa comienzo a decir estupideces.
John: ¿Te ponemos nerviosa, eh? –alzó una ceja-
George: No te preocupes, a mí también me pasa… Y sí, soy de Liverpool, al igual que ellos. –sonrió amistosamente-
Paul: Hola otra vez, Mich.
Yo: Hola, Paul... –le sonreí e intentaba no mirarlo, porque si lo hacía no sé qué otra incoherencia de se me podía escapar- Bueno, pasen y acomoden sus instrumentos. En un minuto será su audición. Ya vengo. –me retiré-
George: Es muy linda.
Paul: Es hermosa.
Ringo: Es muy simpática, sabía que les iba a agradar. 
John: Corrección: ¡sexy! Le re doy.
Paul: Será mía, apuesto lo que quieran.
George: Claro que no, tiene que ser mía.
Paul: Que no. Yo soy el Beatle lindo -(?)- Recuérdalo. ¿Apostamos?
George: Claro, lo que digas… -clocó ojos en blanco, como diciendo: "ay, Dios..."-
John: Y tú Ringo, ¿ya la conocías?
Ringo: Por supuesto, es mi ex novia y una de mis mejores amigas que no veo hace mucho tiempo.
John, Paul & George: ¡No jodas! –dijeron al mismo tiempo-
John: ¿Tú y ella...?
Ringo: Sí.
John: ¿Lo hicieron?
George: A nadie le importa, ¿no, Paul?
Paul: Ay, John por favor. Siempre pensando en eso.
John: ¿Qué? Además, seguro que a ustedes no les importa. Ringo, responde.
Ringo: ¿A quién carajo le importa? Es una muy buena persona y eso es lo que importa.
John: Sí, es muy buena. ¡Responde!
Ringo: Estuvimos dos años de novios, ¿eso responde tu pregunta?
John: Ése es mi Little Richard. -(?)-
En eso aparece Michelle.
Yo: Eh, ya está todo listo, chicos.
John: Ok. -me guiñó un ojo-
Yo: ¿Te ocurre algo, John? –lo miré extrañada, expresión que ya me estaba acostumbrando a hacer cuando se trataba de John-
John: Es que Ringo nos dijo que...
Aparece Ringo y le tapa la boca.
Ringo: ¡No le pasa nada! Perdónalo, siempre se comporta así.
Yo: Bien… Como sea; pasen.




The Beatles hacían la audición con la canción “Hello Little Girl”. Eran simplemente geniales, muy buenos: Lo más cercano a la perfección que había oído.
Luego vino una canción llamada “Like Dreamers Do” compuesta por Paul y John. Paul cantaba y no dejaba de mirarme, cosa que me puso extremadamente nerviosa. Su voz era hermosa, la voz más preciosa que había escuchado en mi vida, lo juro.
Paul: (…) You came just one dream ago, And now I know, That I will love you. I knew when you first said hello, That's how I know That I will love you…
Después John comenzó a cantar “To Know Her is to Love Her”
Cuando John cantaba reflejaba una alegría incomparable, no dejaba de mirar hacia donde yo estaba y sonreír. Dios, ese chico es único. Paul y George se daban cuenta de como él me miraba, cosa que parecía molestarles.
Al terminar esa canción George comenzó a cantar “Crying, Waiting, Hoping” un cover de Buddy Holly. La voz de George era realmente muy dulce, reflejaba una paz como pocos. 
Cantaron una serie de 14 canciones seguidas.
Paul: Each time I look into your eyes, I see that there a heaven lies, And as I look, I see the love of the loved…
Paul no me quitaba la mirada de encima ni por un segundo, George lo notó e hizo que se pusiera muy celoso. John sólo sonría. Era como si Paul me cantara la canción, a mí y sólo a mí. Me sentí especial por un segundo. Su mirada, su voz, su… Todo. Sentía que en ese instante me desmayaba, mis rodillas temblaban, apenas me mantenía de pie. Esto jamás me había pasado. De algo estaba completamente segura: Me había enamorado de Paul McCartney.

Éste fue el primer capítulo, espero ojalá les haya gustado. :3 Infinitas gracias por leer esta abominación a la literatura, 

domingo, 24 de junio de 2012

Introducción.

Sólo es otro fanfic de The Beatles. 
Ambientado a comienzos de 1963, transcurriendo por los años. Narrado por Michelle, una chica francesa perdida en el fascinante “Swinging London” que conoce a los Fab Four gracias a su trabajo en los estudios de DECCA. Junto a sus amigas viven el sueño más increíble de sus vidas, con la aparición de más de una persona que trata de impedirlo, bandas, amor, desamor y todo eso.
¿Te gustaría saber más? Sólo sigue leyendo.